LOS SUEÑOS ROTOS -SOMBRAS-PIEDRAS EN EL CAMINO- DEVIENE EL DESORDEN, VIEJO
DESORDEN EXISTENCIAL.
Ya queda indicado donde aparece el desorden: en la implementación y en el
incumplimiento. Aparece en el camino, en el mal uso de los medios y de los recursos. En
hacer prevalecer los intereses de personas y de grupos sobre el bien común. Cuando las
Organizaciones y Fundaciones creadas para el bien común se usan para el bien particular.
Cuando se destruye una moral de principios para establecer una moral de resultados
económicos o de mayor poder. Cuando los medios de acercamiento terminan aislando.
Cuando se deterioran las relaciones de las personas con Dios, con el prójimo, con la tierra
(naturaleza) y consigo mismo. Sabiendo que todas estas relaciones son inseparables para
la armonía personal y social.
La Luz de la Biblia:
Nos orienta, sin duda, el relato bíblico de la creación, donde se dice:” Y vio Dios que todo
lo que había hecho era muy bueno” (Gn. 1,31). Nos habla de la bondad de todo lo creado.
Pero nos muestra también el origen del mal, “por el mal uso que hizo el hombre de lo
creado”, por la ambición del hombre de querer ser como Dios, por dejarse engañar por el
tentador (Gn. 3). Por la envidia que llega a matar al hermano (Gn. 4,9-11), por los vicios y
por adorar a los falsos dioses, apartándose del verdadero Dios en el tiempo del diluvio
(Gn 6), por la soberbia y ansia de poder (la Torre de Babel Gn.11), por el ansia de placer
(destrucción de Sodoma, Gn.19).
Toda la Biblia nos presenta los desórdenes del egoísmo, del individualismo, del
materialismo, del consumismo y todos los ismos; de la soberbia y del orgullo que quiere
estar por encima de Dios. Olvidando que somos seres limitados, afectados por los
sufrimientos, por las tentaciones y por el destino de la muerte. Ya hemos hecho alusión a
la necesaria convivencia de buenas y malas semillas en la existencia real.
Una mirada a la historia de la humanidad.
Ello nos permite ver las relaciones que los humanos han mantenido con la naturaleza y los
progresos sucesivos de los humanos para mejorar las relaciones con el entorno. Pero
aparecen también periodos en que hay retrocesos: desaparición de especies, cataclismos,
catástrofes. Aparición y desaparición de imperios y culturas. Sucesión de guerras y
conflictos.
Mejores y peores usos de la tecnología y del pensamiento humano. Mejores y peores
hábitos de comportamiento.
¿Por qué ocurren estos desordenes?
La doctrina social de la Iglesia lo explica indicando las múltiples formas del mal uso de los
medios y de los recursos, de la tecnología y de los medios de comunicación. Así como la
prevalencia del egoísmo y de los demás ismos presentes en los pecados personales y
sociales.
Además, son muchos los analistas que detallan las sombras y múltiples formas de
corrupción infiltradas en la manipulación de los planes y programas creados con buenos
objetivos. Interviene la ideología de que “el bien justifica los medios” y a la sombra de
buenos fines y objetivos legitiman medios perversos y corruptos para tener mas
ganancias o para perpetuar el poder.
Ejemplo tenemos cuando los poderosos, a la sobra de la globalización, tratan de
implantar ideologías y estrategias orientadas a mayores ganancias, manipulando el
lenguaje, la educación, los medios de comunicación, las leyes… usando la presión
económica o los engaños. Tal como ocurre por ejemplo con la “ideología de género”, o
cuando reducen el desarrollo al avance económico y tecnológico…erosionando o
aboliendo la conciencia personal, las creencias, la religión ,especialmente la cristiana, la
familia tradicional, la identidad nacional, la moral y la cultura tradicional.
En esta posición los analistas indican algunos personajes ricos y multinacionales:
Rockefeller, George Soros, Banca Richard, Club Bildemberg…
LUCES PARA SEGUIR CAMINANDO
Sabiendo que en toda la historia ha habido luces y sombras, ha habido buenas y malas
semillas, debemos hacer todo lo posible para que en el presente y en el futuro sean más
las luces que las sombras.
Recordando que el Creador nos ha hecho administradores de los bienes y recursos
entregados a nuestro cuidado (Gn. 1,28-29). Recordando también que esa entrega no es
para hacer abuso de ellos, sino para que sepamos cuidarlos y cultivarlos sin sobrepasar
los límites (Gn 2,15-17) y sabiendo que no nos corresponde propiedad absoluta de ellos
(Levítico 25 ,23). Todo esto nos obliga a respetar las leyes de la naturaleza. ( Sal. 148,6).
Empleando siempre el diálogo y la participación responsable para fortalecer la comunión,
con la dinámica de acercar posiciones extremas que sepan dejar de lado los egoísmos y
los fundamentalismos…
Uniéndonos a los grandes sueños del papa Francisco en “Querida Amazonía”:
-Sueño social: para consolidar un “buen vivir”, poniendo la economía al servicio de la
persona.
-Sueño cultural: para respetar la riqueza de las diferentes culturas en el encuentro
intercultural.
– Sueño ecológico: para mejorar nuestra relación con la “casa común”, con el entorno.
-Sueño eclesial: para renovar nuestra vida en una iglesia inculturada, con comunidades
vivas.
Ampliando horizontes más allá de los conflictos (Quer. Amaz. 104-105). Atentos a las
orientaciones de “Laudato SI”163-198.
Y cooperando con los efectos positivos de la sana globalización. Construir sobre todo la
globalización del amor, de la fraternidad, de la justicia. Por la vía de la solidaridad y el
mejor reparto de los bienes y recursos del planeta y mundo en que vivimos, con la luz que
nos ha dejado Jesucristo.
P. Basilio Mateos Colinas. OSA
